sábado, 6 de abril de 2013

Capítulo 6- Treinta por ciento


--Hey, Lucas, ¿qué tal? ¿Estás bien? ¿Has ligado con alguien en el hospital? --dijo Dea en cuanto Lucas cogió el teléfono.
--¿Dea? ¡Hola! Bueno, sí, estoy bien, supongo. ¿Alissa te ha contado lo de la operación?
Me puse la mano en la boca. Entre Dylan, Lucas y las croquetas se me había olvidado contarle a Dea lo de la operación de Lucas.
--No, no me lo había contado...--me miró mal.
''Lo siento'' dije en voz baja.
--Uy, que raro. Bueno, pues en Fallas me van a operar y me gustaría que viniese. 
--¿Y yo no? --se hizo la ofendida.
--Ven tú también si quieres. Por cierto, antes me iba a decir algo y se me cortó, ¿tú sabes que me iba a decir?
Suspiré aliviada. ¡No lo sabía! Lucas no lo sabía, no sabía que Dylan y yo salíamos. Aunque quizá fuese peor. Lucas tenía derecho a saberlo, pero no podía decírselo otra vez. Se lo tomaría mal...  
--No, no sé... ¿Entonces has hecho amigos por ahí?
--Sí, de las clases de aquí y tal.
--¿Y hay chicas? --rió Dea.
--¡Cotilla! Oye, si te pregunto por Alissa, ¿le vas a decir algo?
--No, tranquilo --dijo haciéndome un gesto para que me acercara.
--¿Está mal? Se le ve triste.
--No le has visto --dijo ella levantándose y caminando de un lado para otro, nerviosa. Menos mal que el altavoz estaba puesto.
--Se le oye, escucha, nota. El verbo que quieras usar, está alicaída.
--Pues no sé. Algo triste si que le noto... Cuando vaya allí en Fallas habláis, será lo mejor.
Eché una mirada asesina a Dealia. ¿Tanto le costaba mentir y decir que no me notaba nada? Quizá si se me notaba alicaída, pero lo intentaba disimular. No me gustaba nada preocupar a la gente. Y menos a Lucas, teniendo en cuenta lo que él tenía que aguantar, la enfermedad, todo. 
--Para Fallas queda mucho, a mi me preocupa ahora. Cuida de ella por mi, ¿eh? Que cuando vuelva pienso alegrarla a cosquillas. 
--Si le haces cosquillas hará la croqueta por su sótano.
--Por algo es la Croqueta... --su voz sonó triste y yo sentí ganas de llorar. 
--Sí...--suspiró Dea.
--Dile que se alegre, ¿vale? Por mi.
--Por ti hará lo que sea, Lucas.
Me salió una sonrisa. Que bien me conocía Dea.
--No sé. Oye, ¿sabes si está saliendo con alguien?
--Que yo sepa no--mintió--. Aunque se está acercando a Dylan, pero creo que es como amigos. 
--¿Dylan? ¿Nuestro compañero?
--Ajam. Hablan bastante y se pasan juntos todo el día.
--¿Sabes que ese chico hacía apuestas con sus amigos para ver si conseguía ligarse a alguna de las chicas de la clase y luego romperles el corazón? 
Me quedé paralizada. ¿Qué?
--¿Perdona?
--Sí, este verano ya estuvo con algunas. Dile a Alissa que tenga cuidado, suele conseguirlo.
--Tranquilo, seguro que no te traicionaría...--dijo mirándome mal.
--No estamos juntos, Dea. Es libre. Por cierto, tengo que contarte algo, pero necesito que no se lo digas a Alissa. Se preocuparía demasiado...
--Dispara --dijo ella mirándome.
--Es sobre la operación... Le dije que me operaban, pero no las posibilidades que hay de que sobreviva.
--¿Y cuáles son, Lucas Ambrosio?
--¡Qué no es Lucas Ambrosio! Al final me convencéis. Un treinta por ciento.
--¿Treinta por qué?
--Un treinta por ciento de posibilidades de que sobreviva a la operación.

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